miércoles, 28 de marzo de 2007

Charlas cuaresmales: el veneno del pecado


"Contra ti, contra ti, solo pequé, Señor, cometí la maldad que aborreces" decía el rey David pidiendo perdón por su pecado con Betsabé, como bien relata el cap. 11 del libro II de Samuel y canta el salmo 51. Y es que la historia del hombre es la de un pecador que se acerca o se aleja de la misericordia divina.

En el pecado de David con Betsabé se puede descubrir la maldad del pecado, la ofensa a Dios y la mentira que lleva consigo cualquier pecado. La maldad del pecado porque David no se le ocurre otra cosa que deshacerse de Urias, el marido de Betsabé; la ofensa a Dios porque era un rey que lo tenía todo y actúa contra la ley de Dios como un malhechor cualquiera; y la mentira, porque se ha olvidado que él sólo es el pastor de Israel, por encima está Yavéh, a quien tiene que rendirle cuentas.

Todo pecado tiene ese halo de mentira..."seréis como dioses" que le dijo el demonio a Adán y Eva y ellos se lo creyeron. Así acabaron con el plan que Dios tenía diseñado para ellos, con su amistad, y con una lucha por dentro que todavía no ha terminado. Si, ya sé que es un misterio, pero hay que pedirle a Dios que nos ilumine para conocerlo un poco mejor ya que está en juego nuestra felicidad aquí abajo y luego la eterna.

También quisiera fijarme en esta meditación sobre el pecado, en los pecados de omisión que todos cometemos. Y no estaría mal que repasaras la parábola de los talentos que nos pone el evangelista Mateo 25, 14-30, para que te des cuenta que tienes que hacer fructificar tus talentos: tu fe, tu esperanza, tu amor a Dios. Son tus omisiones y las mías las que hacen que esta redención subjetiva de Cristo se siga retrasando en nuestro mundo. No te lo digo para que te axfisies, sino para que luches por dar fruto, por salir de la mediocridad.

Te dejo con el salmo 36 para que lo medites esta semana de Pasión: "No envidies a los que obral el mal, se secarán pronto como la hierba. Confia en Dios y haz el bien". Esta es la maravilla de la fe cristiana: "confia en Dios y haz el bien".

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