martes, 27 de febrero de 2007

Parece que ha llegado la primavera


No debemos cantar victoria con el tiempo que tenemos, porque nos queda superar el mes de marzo, que es un mes muy variable. Sin embargo, estos dos últimos días de febrero hay que reconocer que han sido primaverales.

En Madrid echamos de menos el agua, porque llevamos unos años muy secos, y eso tiene de malo que crece mucho la contaminación de esta gran ciudad, pero si nos olvidamos de la lluvia, hay que reconocer que tenemos una gran ciudad, porque sigue siendo muy acogedora para todos los que vienen a vivir a ella.

No me canso de recomendar a todos que estos días tan primaverales los aprevechemos para dar un paseo por el campo. Aquí en la parroquia tenemos unos parques, que aunque tienen que mejorar, siguen siendo desconocidos para nuestros vecinos. Por eso no está de más que todos los días saquemos un poco de tiempo para dar un paseo, respirar aire puro, y encontrarnos con nosotros mismos.

Aunque tenemos poco tiempo en una ciudad en que los desplazamientos son inevitables, merece la pena un esfuercín, y aprovecharlo para pasear bajo este cielo azul de Madrid.

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